La minería fue el detonante de una relación que entre 2019 y 2021 fue cordial. Sin embargo, el conflicto nació en 2021, antes de la aprobación de la zonificación minera, que días después fue derogada.

La relación entre el gobernador Mariano Arcioni y el intendente de Trelew, Adrián Maderna, comenzó a resentirse cuando la diputada provincial Leila Lloyd Jones, que responde al jefe municipal, denunció públicamente que los legisladores habían cobrado coimas para sacar adelante la minería en Chubut.

Esa denuncia pública que quedó solo en declaraciones explosivas, salpicó a un funcionario de Arcioni que en ese momento se desempeñaba como asesor. También tiñó a los diputados de todos los espacios. El malestar contra Lloyd Jones fue generalizado. 

A partir de ahí, el vínculo entre Maderna con Arcioni, Sastre y posteriormente con Luque, fue casi nula. Pero se agravó el famoso 15 de diciembre de 2021, cuando Rawson fue un hervidero tras la aprobación de la zonificación minera y que terminó con más de una docena de edificios públicos quemados, entre ellos Casa de Gobierno, Legislatura y el Poder Judicial.

En diálogo con Metadata, Maderna reconoció que el vínculo es nulo: “No he tenido diálogo con ninguno de los dos. No he tenido la oportunidad de hablar con el intendente actual de Comodoro ni con el gobernador”.
Asimismo, dijo que, con las elecciones provinciales consumidas, no hubo cambios en la relación.

“En términos de obras no ha cambiado nada, sigue una relación prácticamente nula”, lamentó el intendente.

Aclaró que “no somos críticos de la gestión provincial porque sabemos que está pasando una situación difícil también, pero sí esperamos que se ayude a la ciudad de Trelew como se ha ayudado a otros municipios”.